Aunque el método más rápido y fiable es emplear siempre algún tipo de conexión por cable, la necesidad de movilidad de ciertos aparatos electrónicos hace que sea necesaria una conexión de datos inalámbrica. En otras ocasiones, aunque la naturaleza de la aplicación permita establecer una conexión cableada entre transmisión y recepción, es más praćtico y económico transmitir la información de forma inalámbrica (es el caso de la TDT, Televisión Digital Terrestre).
Aunque los mecanismos de codificación de la información transmitida de manera inalámbrica son muy variados, todas estas comunicaciones tienen algo en común: se realizan mediante ondas electromagnéticas.
Simplificando el tema al máximo, una onda electromagnética utilizada para enviar información es una combinación de campos eléctricos y magnéticos que viajan desde una antena trasnmisora a una o varias antenas receptoras. Las numerosas comunicaciones inalámbricas que utilizan los dispositivos electrónicos se realiza mediante ondas electromagnéticas.
Con tantas ondas viajando entre nosotros es normal que parte de la sociedad muestre preocupación por su influencia en nuestra salud. Para responder correctamente a cómo nos afectan las ondas electromagnéticas hay que plantearse ciertas cuestiones:
- ¿Las ondas electromagéticas nos atraviesan?
- En general, cuando una onda electromagnética llega a un medio no conductor, penetra en ese medio. La profundidad de la penetración depende fundamentalmente de la energía y la frecuencia de la onda electromagnética. Por ejemplo, una radiación electromagnética, la luz solar, puede transpasar un material o no en función de las propiedades del material y su grosor. Por ejemplo, puede atravesar una hoja de papel sin problemas, pero, si aumentamos el número de hojas lo suficiente, la luz no las atravesará.
- ¿Qué es una onda electromagnética ionizante?
- Las ondas electromagnéticas se pueden dividir en ionizantes y no ionizantes. Una onda electromagnética es ionizante si tiene la capacidad de romper enlaces químicos y de ionizar (cambiar la carga eléctrica) átomos.
- ¿Puede una onda electromagnética causar problemas de salud?
- La respuesta rápida a esta pregunta es sí. Por ejemplo, una onda electromagnética ionizante, como las producidas por elementos radioactivos de manera natural, puede llegar a modificar el ADN de las células y provocar cáncer. En cuanto a las radiaciones electromagnéticas causadas artificialmente, generalmente son no ionizantes y con baja intensidad, aunque hay algunas que pueden también ser peligrosas, como los rayos X, por lo que hay que mantener nuestra exposicón a estas radiaciones al mínimo posible.
- ¿Es preocupante el nivel de intensidad de radiación electromagética que nos llega?
- Teniendo en cuenta los puntos anteriores es evidente que si recibimos una intensidad muy alta de radiación electromagética durante un periodo prolongado de tiempo, nuestra salud se verá seriamente afectada. Sin embargo, las legislaciones de los diferentes países del mundo establecen un límite de intensidad en la radiación que debe llegar a una persona, más alto para los profesionales que trabajan con estas radiaciones y más bajo para el usuario general, que está muy por debajo de la intensidad de radiación peligrosa para la salud, según han demostrado numerosos estudios, por lo que no hay que preocuparse por si la utilización de dispositivos electrónicos afecta a nuestra salud, al menos no por las ondas electromagnéticas que transmiten.